La voz de los mártires

La voz de los mártires
Por Edgar Medina Díaz

«Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe...»
Hebreos12:2 RVR

Bosquejo
Introducción
1. Los mártires
+Los mártires del Antiguo Testamento
+Los mártires del Nuevo Testamento
+Los Mártires anteriores a la Reforma protestante
2. ¿Cuál es el valor de los mártires?
3. ¿Qué nos dicen la voz de los mártires?

Introducción
La palabra que se traduce como testigo en este pasaje es la palabra griega «martur», esta da origen a nuestra palabra «mártir» en el español, que es definida por el Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española, XXI edición como: «Persona que padece muerte por amor de Jesucristo y en defensa de la religión cristiana. Persona que muere o padece mucho en defensa de otras creencias, convicciones o causas.»

1. Los mártires
Los mártires del Antiguo Testamento
Al hablarnos de una «...grande nube de testigos,» el escritor bíblico lo hace en el contexto del capítulo anterior el llamado SALÓN DE LA FAMA DE LA FE, hebreos 11, especialmente los versículos 37 y 38 en su primera parte no dejan lugar a duda a cerca de qué clase de gente se trata: «Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a filo de espada; anduvieron de acá para allá cubiertos de pieles de ovejas y de cabras, pobres, angustiados, maltratados; de los cuales el mundo no era digno; errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas y por las cavernas de la tierra.»
Esta cruda realidad para los santos del Antiguo Pacto aplicó de la misma manera para los del nuevo. El escritor y apologista cristiano Tertuliano (160 – 220 d.C.) dijo.- «La sangre de los mártires es la semilla de la iglesia». Las grandes persecuciones en contra de la iglesia desde la narrada por la misma escritura en hechos 8, han sido a lo largo de la historia el detonador del avivamiento.

Los mártires del Nuevo Testamento
La Biblia nos ofrece el relato del primer martirio de la era cristiana, este fue el de Esteban. El siguiente mártir que encontramos en el relato de Lucas en el propio libro de los hechos de los apóstoles es el de Jacobo hijo de Zebedeo, hermano mayor de Juan el Apóstol, ocurrido aproximadamente 10 años después de la muerte de Esteban, años en los que la persecución en contra de los cristianos se había desatado con furia. Según el historiador evangélico del siglo XVI John Fox alrededor de dos mil cristianos, incluyendo Nicanor, uno de los siete diáconos, padecieron martirio durante la tribulación que sobrevino en el tiempo de Esteban. Le siguieron por este camino Felipe, quien fue crucificado en el 54 de nuestra era, Mateo, martirizado y asesinado en el 60 d.C. en Etiopía. Jacobo, el hermano de nuestro Señor, fue golpeado y apedreado por los judíos. Matías fue apedreado en Jerusalén y luego decapitado. Andrés fue crucificado en Edesa. Marcos fue arrastrado y despedazado en Alejandría. Judas Tadeo fue crucificado en Edesa en el año 72 d.C. Bartolomé murió igualmente crucificado. Tomás pereció al ser atravesado por una lanza. Lucas fue colgado de un olivo en Grecia. Simón el Zelote fue crucificado en el 74 d.C. y el apóstol Juan fue el único que escapó a una muerte violenta a pesar de haber sido martirizado bajo la mano del emperador romano Domiciano.

El apóstol Pablo anunciaba su pronta partida en su segunda carta a Timoteo. Pablo fue decapitado a las afueras de la cuidad de Roma. De la misma manera el apóstol Pedro anunciaba su partida en su segunda carta. Fue crucificado de cabeza, a petición suya, a las afuera de Roma
La historia nos cuenta que fue capturado y sentenciado a morir crucificado en Roma, Pedro solicitó no morir en la misma posición en que lo había hecho nuestro Señor, y le fue concedido ser crucificado boca abajo, cumpliéndose la palabra profética que Jesús la había dado años atrás la cual Juan registró en su evangelio: «De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas a donde querías; mas cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras. Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme.» Juan 21:18-19

Al momento en el que era redactado el libro del Apocalipsis el ángel (mensajero) de Esmirna (Ap. 2:8) era un hombre llamado Policarpo, este es parte del relato del juicio previo a su martirio, según nos lo narra el historiador cristiano Eusebio.-

Policarpo fue detenido y llevado ante el procónsul romano, quien le dijo.-
-Jura en el nombre de Cesar. No te niegues y te dejaré en libertad. ¡Maldice a Cristo!.
Policarpo respondió.-
-hace 86 años que sirvo a Jesucristo y nunca me ha hecho mal alguno ¿cómo podré blasfemas contra mi rey, quien me salvó?
Su oración final fue.-
-«Oh Padre gracias, por haberme llamado a estar aquí en éste día, y me has considerado digo de ocupar mi lugar entre los santos mártires. Amén».

Policarpo fue quemado vivo durante la década de los cincuenta o sesenta del segundo siglo.

A partir de este martirio la cadena de nombres resulta interminable, y a pesar de no haber quedado registrados en las páginas del nuevo testamento, la historia se encargó de que ni ellos ni sus crueles martirios quedaran en el olvido.

Los Mártires anteriores a la Reforma protestante
• Montanistas [Siglo 2]
• Novicianos [Siglo 3]
• Donatistas[Siglo 3]
• Paulicianos [Siglo 7]
• Valdenses [Siglo 12]
• Lollardos [Siglo 14]

Sufrieron por diferir con el cristianismo institucionalizado al creer que:
• La salvación no es por obras, sino por la fe en Cristo.
• El purgatorio es una invención humana.
• Jesús es el único mediador entre Dios y los hombres.
• El culto a las imágenes religiosas es idolatría.
• La iglesia verdadera es la que profesa una Fe Pura.
• Todos los creyentes son Reyes y sacerdotes.
• Rechazo a la confesión auricular.

Todos ellos en su momento levantaron sus voces a favor de Dios y en contra del pecado, a favor de la Biblia y en contra de las tradiciones de los hombres, a favor de la relación personal con Dios y en contra de la religión.

2. ¿Cuál es el valor de los mártires? No es su muerte en sí, sino sus vidas radicalmente vividas. Ellos nos enseñan a:

• Vivir con un corazón perdonador.
• Amar a quienes te han atacado.
• Vivir por la causa de Cristo. La historia de Jim Elliot.
• Ser testigos que no se avergüenzan del evangelio.

3. ¿Qué nos dicen la voz de los mártires?

• La voz de Noe nos dice» La diferencia no la hace tu edad, yo tenía 600 años cuan Dios me llamó a servirle, la diferencia la hace Dios.

• La voz de Esther nos dice» Dios tiene un propósito para ti.

• La voz de José nos dice» Nunca te des por vencido.

• La voz de Moisés nos dice» Vence las malas experiencias del pasado. Vence loa comodidad del presente. Vence el temor del futuro.

• La voz de Nehemías nos dice» No te avergüences de pedir ayuda.

• La voz de David nos dice» Dios te ha dado un gran potencial.

• La voz de los mártires nos dicen» Despójate del pecado que te impide correr la carrera que tienes por delante.